26.8.09

Toda rosa tiene una espina



Bella, majestuosa, radiante, perfumada
así de punsantes y traicionras son sus espinas
que hieren y desangran al tocarlas...

El amor es igual que una rosa
es tierno, dulce, maravilloso y efímero
pero cuando menos lo esperas
te encuentras con sus espinas frias
que perforan hasta el fondo del alma
desgarrando lo más profundo del ser...

2 dejaron huella:

Ligia dijo...

Es verdad que las espinas producen dolor como a veces el amor, pero también es verdad que todas las heridas curan y las cicatrices al final son solo eso, cicatrices. Abrazos

Elizabeth dijo...

Cierto, el proceso de sanación a veces es largo y parece que con nada las heridas se abren nuevamente, aunque como decís al final siempre sanan....

besitos....